¿Qué es el anisakis?
¿Cuántas especies hay?
No existe una sola especie de anisakis. Las especies más comunes son el Anisakis simplex, el Anisakis physerys, el Anisakis tipica, el Anisakis schupakovi, el Pseudoterranova decipiens, y mayoritario en el Mediterráneo, el Hysterothylacium aduncum.
¿Son perjudiciales para el ser humano?
Debido a que los mamíferos marinos son muy similares a los humanos las distintas especies de anisakis pueden infestar a estos últimos si consumen pescado crudo o poco cocinado. Son perjudiciales y pueden causar una enfermedad denominada "anisakiasis" que produce una reacción anafiláctica que a veces puede ser bastante grave.
¿Qué pasa si ingerimos anisakis?
Este parásito siempre habita en los productos de pesca marina. Encontrarlo en una persona solo es posible debido al consumo de estos productos. Si lo ingerimos pasa directamente a alojarse en nuestro sistema digestivo.
Los daños que el parásito nos puede ocasionar dependerá de la sensibilidad de cada uno. Muchos consumidores de pescados podemos tener anticuerpos en nuestro organismo por haber estado en contacto con el anisakis en algún momento. Una vez alojado en nuestro cuerpo podemos tener dos tipos de reacciones:
1- Reacción alérgica, sin necesidad de que esté vivo el animal, debido a la proteína del parásito. Los síntomas aparecen en menos de seis horas y pueden ser urticaria, edemas, etc. Hay que tener en cuenta que muy pocas personas son alérgicas y esto se puede detectar mediante una sencilla prueba que se realiza haciendo pequeños pinchazos en el brazo.
2- Síntomas digestivos, al ingerir las larvas o los huevos vivos, con dolores estomacales que incluso pueden tardar varios días en manifestarse. Pueden ser frecuentes los dolores abdominales y los cuadros de vómitos y diarreas de carácter violento.
Una vez expulsado de nuestro cuerpo el anisakis se acaba el problema pero, al haber sido expuesto a las sustancias que segrega el parásito, hay riesgo de desarrollar la alergia.
Los daños que el parásito nos puede ocasionar dependerá de la sensibilidad de cada uno. Muchos consumidores de pescados podemos tener anticuerpos en nuestro organismo por haber estado en contacto con el anisakis en algún momento. Una vez alojado en nuestro cuerpo podemos tener dos tipos de reacciones:
1- Reacción alérgica, sin necesidad de que esté vivo el animal, debido a la proteína del parásito. Los síntomas aparecen en menos de seis horas y pueden ser urticaria, edemas, etc. Hay que tener en cuenta que muy pocas personas son alérgicas y esto se puede detectar mediante una sencilla prueba que se realiza haciendo pequeños pinchazos en el brazo.
2- Síntomas digestivos, al ingerir las larvas o los huevos vivos, con dolores estomacales que incluso pueden tardar varios días en manifestarse. Pueden ser frecuentes los dolores abdominales y los cuadros de vómitos y diarreas de carácter violento.
Una vez expulsado de nuestro cuerpo el anisakis se acaba el problema pero, al haber sido expuesto a las sustancias que segrega el parásito, hay riesgo de desarrollar la alergia.
¿Qué debemos hacer para prevenir la anisakiasis y la alergia al anisakis?
1- Debemos congelar el pescado que vayamos a comer crudo o poco hecho durante cinco o seis días como mínimo.
2- Nunca debemos comer un pescado crudo sin haberlo previamente congelado. (Boquerones en vinagre, sushi, ceviche, carpaccios, pescado marinado, pescado en salmuera o ligeramente salado, salazones, ahumados...). Si lo consumes sin haberlo hecho tendrás todas las papeletas para ingerir anisakis vivos. Cuando estos productos se compran elaborados, la congelación ya la ha realizado el productor o fabricante.
Se ha constatado que muy pocas personas son alérgicas a las larvas congeladas, pero las hay. En este caso se recomienda evitar totalmente el consumo de pescado de origen marino.
3- Aunque en los moluscos es muy bajo el riesgo de tener anisakis, debemos extremar la precaución sobre todo si se consumen crudos, a no ser que su procedencia sea el cultivo y estén debidamente controlados. Las ostras, los mejillones, las coquinas, las almejas y demás bivalvos que compras no son necesario congelar.
4- Podemos cocinar el alimento fresco sin haberlo congelado previamente pero siempre con la precaución de que le alcance el calor hasta el fondo de los tejidos, ya sea hirviéndolo o friéndolo (a 60º y durante 1 minuto por lo menos en toda a pieza). Las elaboraciones de plancha pueden no ser suficientes para garantizar la muerte del anisakis.
5- El bacalao en salazón, la mojama de atún, el salmón ahumado y otros productos similares que se venden en los establecimientos, se obtienen con procesos en los cuales se mata al parásito, con lo cual no hay problema en su consumo. Otra cosa es hacerlo en casa, en ese caso y como precaución se debe congelar antes el pescado durante cinco días.
5- Si encontramos anisakis en un producto podemos retirar la parte donde se encuentre y consumir el resto. Lo más importante que se debe saber en estos casos es que las personas alérgicas deben tener más cuidado ya que a veces el anisakis se mueve hacia los músculos, y éstos pueden contener restos de proteínas de los nemátodos, pudiendo ocasionar reacciones alérgicas.
2- Nunca debemos comer un pescado crudo sin haberlo previamente congelado. (Boquerones en vinagre, sushi, ceviche, carpaccios, pescado marinado, pescado en salmuera o ligeramente salado, salazones, ahumados...). Si lo consumes sin haberlo hecho tendrás todas las papeletas para ingerir anisakis vivos. Cuando estos productos se compran elaborados, la congelación ya la ha realizado el productor o fabricante.
Se ha constatado que muy pocas personas son alérgicas a las larvas congeladas, pero las hay. En este caso se recomienda evitar totalmente el consumo de pescado de origen marino.
3- Aunque en los moluscos es muy bajo el riesgo de tener anisakis, debemos extremar la precaución sobre todo si se consumen crudos, a no ser que su procedencia sea el cultivo y estén debidamente controlados. Las ostras, los mejillones, las coquinas, las almejas y demás bivalvos que compras no son necesario congelar.
4- Podemos cocinar el alimento fresco sin haberlo congelado previamente pero siempre con la precaución de que le alcance el calor hasta el fondo de los tejidos, ya sea hirviéndolo o friéndolo (a 60º y durante 1 minuto por lo menos en toda a pieza). Las elaboraciones de plancha pueden no ser suficientes para garantizar la muerte del anisakis.
5- El bacalao en salazón, la mojama de atún, el salmón ahumado y otros productos similares que se venden en los establecimientos, se obtienen con procesos en los cuales se mata al parásito, con lo cual no hay problema en su consumo. Otra cosa es hacerlo en casa, en ese caso y como precaución se debe congelar antes el pescado durante cinco días.
5- Si encontramos anisakis en un producto podemos retirar la parte donde se encuentre y consumir el resto. Lo más importante que se debe saber en estos casos es que las personas alérgicas deben tener más cuidado ya que a veces el anisakis se mueve hacia los músculos, y éstos pueden contener restos de proteínas de los nemátodos, pudiendo ocasionar reacciones alérgicas.